El Málaga se prepara para la que será la primera final de las últimas cuatro que tiene por delante antes de cerrar la temporada. Con el claro objetivo de la salvación y ahora a solo cuatro puntos de los puestos de descenso, afronta el duelo ante el Oviedo con más presión que nunca. De ello y más charló Pablo Guede en su rueda de prensa previa al partido.
Guede parte de la base de la necesidad de mejorar lo de Las Palmas: “Fueron siete minutos muy malos en el primer tiempo. En estos minutos nos generaron muchas llegadas, pero luego no estuvimos tan mal. En el segundo tiempo hicimos mejor las cosas. Me quedo con que no bajamos los brazos nunca, lo tuvimos con el cabezazo de Roberto”, destacó.
Sobre la presión de llegar al partido con solo cuatro puntos de ventaja, el argentino se apoya en el pasado: "En el partido de Leganés salimos también con cuatro puntos y lo ganamos. Tenemos que pensar en nosotros, no en los demás. No tiene que generar ninguna presión".
Preguntado por un posible exceso de agresividad (18 amarillas y tres expulsiones desde su llegada), Guede sabe que no es algo que deba preocuparle. "Lo haría si fuese por tonterías, no por lances del juego. La expulsión de Escassi ante el Eibar es inevitable. Sí me preocupan las que son por tonterías, por protestas", añadió.
La baja de Víctor Gómez
"Desde que le expulsaron me lo saqué de la cabeza, no lo valoro ni más ni menos. Esas cosas pueden sonar a excusas. No las tenemos, contamos con jugadores para competir a cualquiera".
El apoyo de la gente con las entradas
"Lo dije el primer día. Nos quedan cuatro partidos, son cuatro finales. Unidos es mucho más difícil que nos ganen. Con esta iniciativa del club no me cabe duda de que la gente estará".
Posible conflicto de jugadores con el filial
“Si el entrenador del filial lo reclama, yo no tengo ningún problema. Esto es el Málaga. Si esos jugadores son válidos para el objetivo, bien”