Pablo Chavarría (Las Perdices, Córdoba, Argentina, 1988) nunca ha dejado de sentirse futbolista. Lejos de amedrentarse por la peor de las lesiones, a los cinco meses de una operación del ligamento cruzado anterior de su rodilla izquierda ya estaba entrenando. A sus 34 años y aún buscando la continuidad, solo habla del ahora y deja clara su filosofía de vida: "No me pregunto por qué pasan las cosas, sino qué voy a hacer para superarlas". El delantero atiende a 'BeSoccer Málaga' tras una mañana larga, con sesión de vídeo incluida, justo antes de comer con sus compañeros. Esta es su visión de este equipo, del fútbol y del mundo en general.
BeSoccer Málaga: Qué bueno ganar por fin. ¿Qué energía hay en el vestuario?
Chavarría: Estamos todos muy contentos por la victoria, la necesitábamos mucho. Era muy merecida porque hicimos muy buen partido, respetamos el plan de juego y pudimos venirnos con los tres puntos.
Su primera titularidad desde el 3 de enero contra el Alcorcón. ¿Cómo se vio?
Me sentí bien. El plan de juego fue atacar con dos junto a Brandon, fijar a los defensores para que los interiores pudieran recibir más solos y que los centrales estuvieran con nosotros. La verdad es que salió bien. Quizá no hubo muchas situaciones de centro para nosotros, que era lo que trabajamos, pero el colectivo va por encima y el resultado fue bueno.
Ha tenido ya varias dolencias esta temporada, la última de mes y medio, algo normal después de lesiones largas como la suya, pero tiene que ser duro ese "quiero y no puedo" una vez le dan el alta de la rodilla.
Sí, es lo peor, claro. Hay jugadores que demoran un año en volver de lesiones de ligamentos cruzados, yo a los cinco meses y una semana estaba entrenando con el equipo. Nunca tuve una recaída ni una molestia de la rodilla, las lesiones fueron musculares. Luego es normal por el tiempo de inactividad. Al final tienes que entender que el tiempo que estuviste sin jugar, esto es algo que pasa con jugadores muy jóvenes como por ejemplo Ansu Fati. Yo estoy tratando de ponerme a punto en lo físico y esperemos que esta lesión que tuve haya sido la última porque me siento muy bien.
"El club estuvo conmigo desde el día uno, confió en mí y tengo que devolverle esa confianza"
¿En qué parte del proceso está?
Se va a cumplir un año desde que me operaron, que fue el 10 de marzo de 2021, y la verdad que no tuve vacaciones, no paré nunca. Desde el día uno estaba pensando en estar al 100% y es recién ahora cuando me encuentro muy, muy bien. Las lesiones son parte del fútbol y en mi cabeza está mirar adelante.
¿Qué recuerda del momento de la lesión en Miranda de Ebro? Ya sufrió otra rotura del cruzado en la otra rodilla, la derecha, más joven.
Yo me dí cuenta en el momento de lo que pasaba. Mis compañeros y el cuerpo técnico no creían que fuera tan grave, pero yo lo sabía y se lo dije. Más que nada, el primer momento es muy chocante porque sabes que vas a estar mucho tiempo sin jugar, pero digamos que al otro día ya pensaba en operarme lo más rápido para volver. Soy muy positivo en ese sentido, no me pregunto por qué pasan las cosas, sino qué voy a hacer para superarlas.
Y el club le renovó dos temporadas más, hasta 2023. Un gesto muy tranquilizador para un futbolista en su situación.
El club estuvo conmigo desde el día uno, confió mucho en mí y ahora lo que queda es devolverle en el campo toda la confianza que me dio. Solo pienso en estar al 100% y rendir en el campo, porque yo sé que si este año no tengo más lesiones voy a recuperar mi nivel de siempre.
Se ha hablado mucho en las últimas semanas del aspecto mental del equipo. ¿Había trabajado antes con psicólogos deportivos?
Sí, en Belgrano de Córdoba y en un club de Francia tuve ya esta experiencia. Aquí en el Málaga hace unos días nos dieron una charla y nos fue muy bien. Creo mucho en eso, en que la cabeza puede ser todo en un jugador de fútbol. Veremos esta semana si seguimos hablando con él, que es muy importante.
¿Qué aspectos han hablado con él? Natxo González habló varias veces de ansiedad.
En los clubes en los que estuve, más que nada trabajamos con los psicólogos la cohesión del grupo, tirar todos del mismo lado. Yo pienso que es algo fundamental porque un equipo es un grupo grande en el que algunos juegan más, otros menos, y la relación entre nosotros es fundamental. Tenemos un grupo muy bueno, de los mejores que he vivido en mi carrera, pero fue duro. Tuvimos dos meses muy malos a nivel de resultados, hubo veces que merecimos más y el resultado no se dio, pero la mayoría de los equipos de Segunda tienen esta serie de partidos. Esperamos que para nosotros haya pasado lo peor, yo pienso que la cabeza va a cambiar y vamos a soltarnos un poco.
A Natxo también le habrán pesado los resultados. ¿A él cómo le ha visto?
Pues siempre le vi igual, es una persona muy tranquila, con mucha experiencia, algo que se nota en cada charla que da delante del grupo. Es admirable porque nunca cambió la forma de entrenar ni de ser por esta mala racha.
"Hubo veces que merecimos más y el resultado no se dio, pero la mayoría de equipos de Segunda tienen esta serie de partidos"
La bofetada del empate con el Cartagena es grande. ¿Cómo fue su reacción?
Fue muy duro porque es que además era la única ocasión clara que tuvo el rival. Pero luego el entrenador se portó muy bien durante la semana, insistió en todas las cosas positivas que hicimos, que fueron más que las malas, y nos hizo pensar solo en trabajar para ganar al Amorebieta porque sabíamos que era un rival directo y lo necesitaríamos mucho.
Un entrenador necesita resultados para que el equipo también crea en su discurso.
Nada, nosotros no tuvimos ningún tipo de duda con él. En el fútbol es verdad que mandan los resultados, sabemos que con lo que pase el fin de semana siempre habrá críticas, pero lo importante es que ganamos.
¿En qué les insiste? Poco a poco se ve a un Málaga muy cambiado tácticamente.
Sí, se buscan soluciones distintas. El otro día jugamos con cinco atrás y eso cambia muchísimo la manera de atacar y defender, pero respetamos el plan de juego. El Amorebieta era un rival que también jugaba con cinco y por eso seguimos esa línea. El entrenador decide y nosotros tratamos de dar lo mejor.
"No sé si me gustaría ser técnico algún día, ahora mismo estoy más en el no que en el sí"
Ahora llega la Ponferradina, que está en buena dinámica.
Ellos pelean los puestos de arriba, nosotros estamos abajo, pero vamos a intentar lograr una regularidad y salir a ganar como siempre. Daremos todo para que este partido no tenga nada que ver con el de la primera vuelta [el Málaga perdió 4-0].
Es interesante escucharle hablar analíticamente de fútbol. ¿Se ha planteado su futuro en algún momento en ese sentido? ¿Se ve entrenando?
¡Uy! Nada, nada. Me siento muy jugador todavía, de verdad que no pienso en el futuro. No sé si me gustaría ser técnico algún día, ahora mismo estoy más en el no que en el sí, pero veremos cuando acabe mi carrera. Ahora solo pienso en ponerme bien al 100%.
Y volviendo al ahora, ¿qué le pide a lo que queda de temporada?
Lograr regularidad, poder jugar varios partidos seguidos y recuperar el nivel, que es lo principal para terminar bien la temporada. Fue dura en lo personal, no jugué mucho por causa de las lesiones, pero soy optimista con el futuro.