Álvaro Vadillo completó sus dos primeras titularidades en el Málaga con dos asistencias. Ahora, con Pablo Guede, ha encontrado el gol en otros dos encuentros consecutivos actuando como punta, algo que el extremo de Puerto Real nunca había hecho en su carrera. De ello habló en 'Deportes COPE Málaga', donde desglosó su corta trayectoria como cedido por el Espanyol.
"A ver si he descubierto tarde mi posición en el fútbol", bromeó. "Activamente nunca había jugado de delantero, a veces te cambias en un partido, pero de inicio, asiduamente y encontrándome tan bien nunca", expresó un Vadillo que analizaba su función en el once: "El primer partido que jugó apostó por un 5-3-2, que ahí desaparecen los extremos, y creyó que yo podía hacer la función de delantero para presionar, recibir entre líneas por dentro... de cara a portería me ha venido bastante bien".
Cuestionado por los cambios con Guede, el ex bético quiso tener un gesto con los otros dos técnicos con los que ha trabajado en estos meses: "A Pablo no lo voy a descubrir yo, lo conoceréis vosotros de sobra. Es un entrenador que transmite mucho y muy positivo. También me quiero acordar de José Alberto y de Natxo González, que hicieron muy buen trabajo. Con José Alberto no pude compartir mucho, pero Natxo tuvo la mala suerte de los resultados. Hicimos bastantes buenos partidos con él. Son los cambios del fútbol, llega Pablo, empatamos a un equipo que lucha el ascenso directo, vamos a Leganés y hacemos la mayor goleada de la temporada".
Entiende Vadillo que el marcador nunca le hizo justicia a José Alberto y Natxo: "Por muy buen trabajo que hagas, lo que manda en el fútbol son los resultados. Contra el Cartagena merecemos los tres puntos y nos marcan en el último minuto de chilena. Natxo es destituido en su mejor partido de técnico en el Málaga como es en Girona, que merecimos ganar contundentemente. Son detalles que marcan el fútbol. Pablo nos ha dado ese punto de agresividad que transmite desde el primer momento, pero antes se hicieron bien las cosas". "Si el Ibiza no es un 0-5 y un 0-2 lo mismo tenemos otro técnico, si Okazaki no marca ese día a lo mejor no habrían echado a Natxo. Pero en cuanto a la creencia en revertir la situación, tenemos el mismo Málaga desde que llegué hasta el día de hoy", insistió.
Personalmente, el extremo tiene sensaciones encontradas. Feliz por su mejoría, infeliz por lo poco que le queda: "Soy consciente de que de aquí a final de año no iba a alcanzar el ritmo de mis compañeros. Al final son dos años sin competir, son dos años jugando cinco, diez o tres minutos. Es muy difícil en unos meses ponerte al nivel de compañeros que vienen de hacer una pretemporada. Mi objetivo era ponerme lo mejor posible, a lo que me diera, intentar tener minutos, ayudar al Málaga a conseguir el objetivo y a medida que estoy teniendo más minutos me estoy encontrando mejor, no hay secretos. Sabía que el inicio iba a ser complicado por la falta de rodaje, pero a medida que me encuentro mejor, menos partidos quedan. Mala suerte. Ahora que estoy con confianza y un puntito mejor, está la temporada acabando. Estoy feliz por la decisión de venir a Málaga".
¿Y qué hay de su futuro?: "Me quedan dos años más con el Espanyol. No lo oculto y la gente alrededor sabe que en Andalucía estoy muy a gusto y es donde doy mi mejor fútbol. Tengo a la familia cerca porque soy de aquí, pero tengo contrato con el Espanyol y no me gusta pensar en qué pasará en julio. Quiero acabar bien en Málaga porque soy feliz y estoy disfrutando y cuando llegue el momento de decidir se verá. Es algo en lo que no quiero gastar ni un poquito de energía ni me preocupa. Estoy feliz y en lo poco que me queda disfrutarlo y estar sin pensar en qué va a pasar. Cuando llegue el momento, que habrá tiempo, se decidirá. La realidad es una y es que soy jugador del Espanyol, en julio tendré que volver a hacer la pretemporada y no sé qué idea tienen conmigo, si de que me quede, buscar una cesión... Ya se verá".
Vadillo también tuvo palabras para Kevin, desaparecido en las últimas semanas incluso tras el cambio de entrenador. El extremo, que conoce bien estas situaciones difíciles, le aconseja: "Es un chaval con el que hice buenas migas desde que llegué, le tengo mucho aprecio. Es un encanto. Con Natxo perdió un poco de protagonismo, ahora tampoco lo tiene con Pablo porque no usa los extremos mucho y él es jugador de estar pegado a banda y encarar. No está teniendo la oportunidad, pero el otro día tras el partido estuve hablando con él. Le pedí que se tomara las cosas con calma, que se encontrará muchas situaciones como esta en su carrera. Porque desde que es profesional le ha venido todo rodado y eso es mentira, no suele pasar en el fútbol. Esto le va a ayudar a saber gestionarlas y mejorar en su futuro".